Podrás correr y esconderte. Sí, claro que puedes hacerlo. Lo único es que, por más que escapes, todo se mantiene en su lugar. Seguirás falto, de aquello que te hace escapar y te mantiene en esa ola envolvente y quebradiza, que te atrapa en la incertidumbre de no tener, niContinuar Leyendo