Añoranzas de una casa
¡Y si te digo que tu realidad puede cambiar, sólo por responsabilizarte de lo que es tuyo! Esto le pasó a una casa, a la que no paraba de entrarle agua, hasta que su dueña, por fin, tomó las riendas, se hizo cargo y simplemente aceptó el hecho de queContinuar Leyendo