Es, en el momento preciso, cuando y porque así ha de ser.
Solo, en el instante perfecto para ti.
Todo es gracias a la creación, primero a la de Dios, luego se ha transformado en las que haces tú… esas realidades que creas y haces presentes.
La idea e intención es tener la consciencia de no estar separados, algo a lo que nos hemos acostumbrado demasiadas veces y sí, casi seguimos manteniendo.
¿Te sientes en unidad con Dios, o crees que es algo ajeno a ti, maligno y causante de aquello que consideras en desacuerdo contigo, con tus supuestas elecciones?
Por mi parte, cierto es que en alguna ocasión me he sentido menos unida a Él, incluso creí estar separada, sola. Anhelaba tanto el Hogar, que yo misma me impedía estar sanamente en este cuerpo.

Afortunadamente, fue un proceso que elegí para aprender ciertos matices y lecciones que necesité aprender.
A día de hoy conozco muchos detalles de mi experiencia y el resto, sigo en camino de reencontrarme con mi mejor versión.
¿Cómo te encuentras tú, en qué punto?
Si te apetece contarme algo, me alegrará leerte y aprender contigo.
Feliz presente.
Descubre más desde Asun Adá
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.