Me gusta cuando la vida me recuerda que Soy efímera. Aunque en ocasiones, lo hace a través de un golpe, que esperándolo o no, mueve el mundo y su entorno.

Y es que ahora puedo despedirme.
Ya la marcha en sí misma no es el propio sentir de una pérdida, sino el aliento de haber compartido.

Son muchos los momentos en que podemos sentirnos apenados, tristes, solos incluso. Pero la vida es mucho más que eso, es una gran oportunidad a Ser.

La necesidad de expresarnos resulta el momento de sabernos vivos para, compartir cada instante que somos, por más efímero que finalmente pueda resultar.

Vivir es ganar.
Regresar al Hogar es la sublime grandeza.

Canalización 🤲🏻 ©AsunAdá enAmor Agradecida

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