Todo puede ser perfecto, de hecho, lo es.
Y esto sucede, independientemente a tus creencias. Sí, las vidas suceden así.
Porque lo sencillo de la vida, es el juego que nos regala, las oportunidades que en cada instante, podemos decidir experimentar.
Es maravilloso ser consciente de ello, porque desde esta perspectiva, puedes ver los motivos por los cuales suceden las cosas. El plan que traes, el que has marcado con tu Alma se lleva a cabo y si eres consciente de ello, entonces sólo puedes sentirte agradecido, sonreír desde tu corazón.
¿Te pasa esto en tu vida?
A mí hace tiempo que sí me sucede. Sobre todo, soy más consciente de esta evolución, cuando empecé a dejar de culpar a otros por las experiencias de mi infancia, y nos fui perdonando. Entendí que eran parte de aquello que yo había pedido, que nadie era el malo o el bueno de la experiencia, sino que todo se daba según mis peticiones.
Sí, incluso lo más trágico que había vivido, ya en mi infancia o en la edad adulta, lo había pedido yo para aprender.
El perdón.
¿Cómo puedes perdonar a alguien que abusó de ti, que te maltrató, o que violó?
Parece una locura poder perdonar en semejantes situaciones, verdad. Pues fue un proceso de Amor hacia mí, de perdón por no haber entendido que había sido yo la que quiso pasar por ello para aprender con mis experiencias.
Sí, he podido perdonar a los otros y como te digo, empecé por perdonarme a mí. Pasé por el reconocimiento de mi dolor para recordar lo sucedido y amar a la niña, a la adolescente y a la mujer que habitan en este cuerpo que da cobijo a mi Alma, a mi Ser.
Y me sentí tranquila, en paz conmigo misma. Me siento llena de vida porque he cumplido esa parte de trabajo que traía a esta vida, que tengo y que mantengo entregada a la Divinidad que me habita.
La vibración correcta en el momento exacto, cuando tu Alma sabe que estáis preparadas.
Creía tantas veces, que no merecía lo que me pasaba, que el dolor lo transformé en sufrimiento, y no me daba cuenta de que era mi ego el que me impedía ver que sí era posible, que yo misma así lo había pedido.
Hoy sigo dando las gracias por todas y cada una de mis lecciones, porque estoy despierta y sé que me han traído al encuentro verdadero con mi Alma. He dejado de huir, de escapar a mi verdad y de la Voluntad de mi verdadero Yo Soy.
INCLUSO LO MÁS TRÁGICO QUE HE VIVIDO, LO HE PEDIDO YO PARA APRENDER.
¿Te identificas con tus vivencias, con que todo lo que te sucede te pertenece como responsable, o crees que es cosa de otros?
Ser responsable es más que respetar o llegar a la hora. Es hacerte partícipe de saber que eres parte inseparable del universo, o multiverso, del Todo, y que Tú, tienes el poder de decidir qué quieres experimentar y aprender para que en ti se haga tu voluntad…
Feliz presente, Asun Adá
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