Nada escapa a tu verdad.
Si no lo quieres ver, sigue sin mirar.
Cuando piensas en lo que es,
eso que ves,
dejas de estar en tu camino.
Te sales de ti para hacer frente
a lo que te dices
es real,
verdaderamente, no lo es.
La existencia del Ser humano se da para que puedas recordar tu propia esencia.
¿Recuerdas tu “para qué” estás aquí?
Anhelar el Hogar es posible porque tu origen es en Dios, permítete aventurarte en el transitar de tu vida.
Sonríe y disfruta de tu proceso personal.
¡Feliz viaje!
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