Te empeñas en lo complejo y vas dejando atrás lo que tanto te hacía reír, aquello que sin más conseguía que en tu rostro se plasmase una sonrisa.

¿Y cuál es el verdadero motivo de que ya no sonrías?

Ni tú mismo sabes qué ha sucedido, ni lo que pasó ayer, ni por qué has dejado de soñar.

La inocencia que tenemos cuando somos niños se queda en nuestro interior, ella quiere que ser la base de nuestra experiencia pero, nos educan con la intención de que la escondamos, se alimenta el afán con repertorio de crecer en que el tiempo del niño termina para siempre cuando madura, cuando se hace hombre o mujer y, ha de permanecer oculto de por vida.

Incluso se nos trata de irresponsables cuando hacemos uso de él.

Sin duda alguna la vida es para los niños, para la inocencia, para la Gratitud y con todo ello, debieras pues reconocerte en tu niño interior y permitir que sea él o ella mismos, con la única intención de volar alto hacia su Propósito de Vida.

Como la propia vida, la simpleza de lo sencillo, es lo que nos trae en este instante, en cada uno que tenemos oportunidad de vivir.

 Canalización 🤲🏻 
 ©AsunAdá Siempre enAmor Agradecida  

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