Y entonces se encontró mirando al mar y,
sonriendo a su propia sombra,
se dió cuenta de que estaba en sí
La soledad no es tal, ni ayer ni hoy ni nunca pues
cuando crees que algo está separado del Todo y,
pides respuesta a la situación encuentras
que ni tu, ni yo, ni nadie
estamos separados de nosotros, ni de la Unidad
no de la Divinidad de Dios que es en nosotros mimos también.
Tememos tanto y durante tanto tiempo, que se nos olvida casi, incluso el propio vivir. El experimentar la vida desde la plenitud del Ser que somos, desde la alegría del niño que nos habita y con el que podríamos recorrer el mundo intercambiando distintas opciones de tiempos y maneras que, alimentasen las Almas de quienes necesitan alimento. Pues es compartiendo, desde la compasión y la empatía que podemos alcanzar la plenitud del aprendizaje humildemente y enAmor.
En ti reside cada pieza del puzzle que quieres hacer, decide y mueve.
Canalización 🤲🏻 ©AsunAdá Siempre enAmor Agradecida
Descubre más desde Asun Adá
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.