Para. Alto. Detente. Stop.
Por un momento, quédate con el pensamiento de estas letras que estás leyendo.
Bien sea desde el portátil, el teléfono o el dispositivo que uses, presta atención en tu mente solamente a esto.
Deja de pensar en qué has hecho durante el día, o qué vas a hacer después, o mañana.
Libérate de tu mente. Respira profundamente y, por tres veces inhala y exhala intensamente. Cuando hayan transcurrido esas tres respiraciones sigue respirando a tu ritmo, no lento ni rápido, como sientas que has de hacerlo en este ahora.
Tómate un tiempo así, respirando a tu ritmo contigo. Inhala y exhala por la nariz.
Y si puedes, ten las piernas y brazos sin cruzar, y la espalda recta. No importa si estás sentado o tumbado.
Y ahora, respira y piensa en este momento de Tu Vida:
¿A QUÉ TIENES MIEDO?
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