Dices que respetas, cuando realmente solo pretendes que otros lo hagan hacia ti.
Te empeñas en dar tu veredicto a alguien, cuando simplemente se expone y ofrece su opinión. Cuando trata de realizar su camino, y porque así ha de ser.
Quieres ser libre y que te respeten, sin embargo, machacas a otros por hacer lo que tú, quieres hacer. ¿Cuál es la diferencia?
En ocasiones te empeñas en hablar, mientras que lo que dices no es mejor que el silencio, o tampoco aporta sabiduría al hecho que se produce, y entonces, la pregunta es ¿para qué has hablado, cuál es el motivo que te ha llevado a ello?
Reconocer si estás en tu verdad o camino hacen que el modo en que vives, sea el más cercano a ti.
Cuando aprender es el propósito, entonces da gracias a la Luz que habita en tu interior se hace real, aparece para que puedas manifestarte en el presente.
Somos iguales, aun siendo diferentes.
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