A lo largo del día haces labores que te transportan de un lugar a otro. 

Encuentras nuevas ideas para llevar a cabo y, descartas las que no vibran contigo porque son distinto a lo que creías, y no pasa nada. Puedes hacer lo que quieras, aquello que consideres perfecto para ti. El estado de perfección es distinto para cada persona, lo que para uno sea perfecto, para el otro podría estar lejos de esa perfección. Y es que porque sea diferente para ti, no por ello deja de ser perfecto. 

Guiarte en tu vida por los pasos que han dado otros, o mediante lo aprendido que no te has cuestionado si va contigo y simplemente lo has aceptado como personal, puede que no sea la manera de vivir que te corresponde. El hecho de no partir de tu base asentada a ti, hace que los resultados que obtienes tampoco sean los acertados conforme a tu ser y esencia. 

 

Reconcíliate contigo: déjate guiar por tus sentimientos, no por la experiencia obtenida de otros con sus vidas, canalización por Asun Adá

Haz un paseo por tu infancia.

Intenta descifrar las reglas o normas que has adoptado como tuyas, o que crees que te gustan y averigua de dónde proceden, tal vez encuentres que tienes estructuradas maneras de hacer, de pensar, de vivir, que en realidad ni te pertenecen, y te están dañando. 

 

Examina tu interior y mira si está nutrido de ideas obsoletas, si son ajenas y si están  dispuestas a que las modifiques por las tuyas propias.

 
¿Te apetece un ratito contigo? 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *