Cuando esa comunidad en la que te encuentras, parece ajena a ti. O tú a ella.
Hay instantes, por pequeños o grandes que sean, que te resultan absolutamente locos, extravagantes, maravillosos. Y todo está perfecto.
Si eres consciente de eso, la vida te muestra, o mejor dicho:
Cuando tú te abres, la Magia de la existencia aparece.
Porque realmente ella es siempre, aunque no logres ni sentirla o apreciarla. Qué decir si eres o no, capaz de experimentarla.
Afortunadamente para todo ser, ese regalo está disponible. Luego resultará lo que nosotros aportemos a su aceptación y reconocimiento.
Cómo te sientes, hace que sea gracias a ti, la captación de la existencia de lo no visible, algo que ha de ser sentido desde el corazón, con la voz del alma.
Según vives tus pensamientos, creencias y cómo te muestres en esa actitud ante la vida que se te presenta, está directamente relacionado con el cómo eres en ese momento preciso.
No sirve experimentar desde los recuerdos, o a través de las vivencias ajenas, tú haces que sea tu vida tal y como es.
¿Dispuesta a dar ese paso de confianza contigo?
De ti depende el cómo quieres hacerle frente.
