Hay momentos en que todo parece fuera de lugar y crees no encajar, ni alcanzas a saber qué sitio es el tuyo, te lleva también a plantearte si te corresponde en el que estás.
Sin ser consciente de la situación te envuelves en la encrucijada de un profundo laberinto en el que solamente das vueltas sin parar y, sin permitir que tu esencia se manifieste siendo tu guía.
Casi podríamos decir que te mueves por la inercia de lo aprendido que, has de desaprender.
Alcanzar el lugar propio, el personal en que solamente eres tú, es fácil, si te lo planteas y te lo propones como tal. De no ser una decisión propia y consciente puede ser extremadamente complejo por el hecho de que te limitas en ver, en fluir con lo que podría ser. Es como si dejases de ser tu mismo, sin mirarte, desconociendo quién eres y qué quieres.
Cuando algo se derrama, o te supera, puedes encontrar infinitas soluciones, sólo has de abrir tu mente y escucharte para encontrar la verdadera para tu mayor bien en el camino que te atañe. Permítete, con el silencio de tu mente, escuchar a tu alma.
Y así, mientras me encontraba en el silencio de las palabras, un día, te vi. Recuerdo que leí unas letras que me resonaron y poco después y en la vibración de tu esencia te sentí.
Canalización 🤲🏻 ©AsunAdá Siempre enAmor Agradecida
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