Habían pasado tantos tiempos que no recordaba siquiera la sensación de una sonrisa, o el sonido de una voz. Tampoco la que tanto buscó y apenas encontró, el caluroso abrazo que entre largas y profundas respiraciones pretendía proporcionarle un lugar a dónde regresar.

Fue entonces que se mostró al mundo y dejó que su helado corazón se fundiese con el frío de la noche y el calor del fuego avivando así su cálido despertar tan ansiado.

Siempre enAmor Agradecida ©AsunAdá

Escucha: https://youtu.be/2yMvdqSOF4g


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