Sanar el maltrato que te provocas.
El que has generado. Ese que has arrastrado por el tiempo que requerías, y los tiempos que llevas.
Aprender a gestionarte, a saber cómo y qué sientes con lo que haces.
Reconocer quién eres es fundamental.
Creer que no eres capaz o subsanar el fallo, corregir errores cuando los ves.
Permitirte.
No soy peor, tampoco mejor que otro.
Yo Soy.
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