Encarnaciones son seguramente más de una en las que hemos coincidido. No por eso de la casualidad, sino porque las almas tienen familias y propósitos en los que colaborar unas con otras para lograr así los aprendizajes, tanto personales como aquellos para los que nos comprometemos dentro de la familia, que aunque suene a clan de alguna saga o película, se usa en infinitos ámbitos como este caso de familia álmica.

Y así, decididos a venir, adoptamos una forma física en un cuerpo para dar rienda suelta al momento. Aprendemos entre experiencias y decisiones.
Con ello se presentan en nuestro día objetivos de distintos matices para observar y tantear la capacidad que tenemos al enfrentarnos a todo cuanto necesitamos con el fin de sanar lo que corresponda. Es un gran regalo, una manera peculiar en que trazamos un plan de vida con infinitas posibilidades y al alcance de todas y cada una de las disposiciones del libre albedrío que, tanto es en nosotros como en el resto de almas que nos acompañan y a las que también damos apoyo.


Cada oportunidad nos brinda la grandeza de sonreír a la vida presente y rendir homenaje a las que hemos tenido, a las que quizá sean o a la propia esencia que somos. Permite a tus alas brillar mientras alcanzas el vuelo de la sabiduría en tu despertar hacia la humanidad.


Desde el humilde sentir de mi alma en esta encarnación, Gracias por ser en mi familia.


Canalización 🤲🏻 ©AsunAdá Siempre enAmor Agradecida


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