Déjate llevar.
Siéntate sin cruzar ni pies ni brazos.
Pon en pausa tus pensamientos.

Por un instante simplemente, respira.
A tu ritmo, sin más que eso.

Cierra los ojos y, sigue el aire que entra en tu cuerpo y sé consciente de cómo recorre tu cuerpo.

Respira tranquilamente. Inspira y expira por la nariz, pausadamente mientras sientes el aire que te va iluminado por dentro y te llena de paz.

Tómate al menos unos 3 minutos así, sin más y siéntete.

Sí agradece. Date las gracias.
¡Gracias por estar contigo!

Canalización 🤲🏻 ©AsunAdá Siempre enAmor Agradecida 

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